El proceso productivo del GRUPO HIDALGO comienza con una estricta selección de pollitos tras el proceso de incubación, pasando después a criarse en nuestras granjas integradas hasta alcanzar el peso óptimo.
Todo el proceso de crecimiento es vigilado de forma continua por nuestros veterinarios, quienes controlan por un lado que la alimentación sea de la mayor calidad, y por otro que la temperatura, higiene y ventilación sean correctas.
El sacrificio de las aves se lleva a cabo mediante un
proceso en cadena de sangrado, desplumado, eviscerado, lavado, enfriamiento, clasificado y etiquetado para su despiece y/o distribución final.
El sacrificio comienza a las 12 de la noche y tras finalizar todo el proceso productivo, las canales son distribuidas a los puntos de venta por la mañana,
llegando siempre a nuestro cliente y al consumidor final un producto totalmente fresco.
Gracias a un CONTROL DE INTEGRADO se consigue el seguimiento de las aves desde su origen hasta los clientes, conociéndose todos los pasos que han seguido las aves durante el proceso productivo.
Las empresas del Grupo Hidalgo disponen de varias Certificaciones de Calidad que garantizan sus productos